Turismo en Ámsterdam: qué ver, qué comer y qué sentir

La ciudad de Van Gogh, de las flores, de los canales (sin menospreciar a Venecia), de Anna Frank. Del barrio rojo, de los coffee shops, de la diversidad, de la tolerancia. Y de las bicicletas. Va, venga, que nos cogemos una y nos la recorremos. Es una de nuestras ciudades europeas clave. Pasar sólo un día haciendo turismo en Ámsterdam puede parecer poco tiempo. Pero da para mucho si sabes organizarte. No te vuelvas loco que no es tan complicado. Tienes 24 horas, 1440 minutos, 86400 segundos. Calzado cómodo que empezamos.

Punto número uno. Lleva los planes hechos. Si desde el minuto uno sabes que hacer todo va a ser más fácil. No me vengas con que te mola improvisar y que tú vuelas libre cual pajarillo, que si empezamos con esas no nos da tiempo a nada. No es que tengas que decir dónde vas a estar cada 5 minutos como si fuese tu madre en modo sargento cuando sales de casa, pero hombre, un poco de planificación no nos viene mal. Qué mínimo que saber por dónde empezar y dónde terminar tu día de turismo en Ámsterdam.

Hacemos una cosa. Te damos todo lo super mega imprescindible y luego tú, mapa y gustos en mano, decides qué hacer, si recorrerte todo lo que te decimos, o perder más tiempo en la terracita de turno. Piensa muy fuerte que sólo vas a estar un día de turismo en Ámsterdam, a ver si así lo de vaguear se queda en casa cuando hagas la maleta.

Pongamos que decides empezar, siguiendo nuestra magnífica recomendación, con un pequeño crucero (oh, sí, déjanos llamarlo así) por los canales de la ciudad. Desde el barquito irás recorriendo el centro histórico y divisando las zonas y los monumentos más top de la city. Prepárate para ir de proa a popa, de babor a estribor con tu palo selfie y la compañía, tienes que retratarlo todo, todo.

turismo en ámsterdam canales
En uno de esos barquitos, con todo tu postureo, yes.

Cuando acabes tu relajante paseo una buena opción es seguir con el barrio de los museos. Ojo, que lo tienen bien montado. Les ponen todos juntitos y así no te escapas o usas un «ufff, es que está muy lejos» para librarte. Todo un escaparate de museos en unas cuantas calles. Ah sí, y al llegar por allí puedes aprovechar y conocer el parque Volderpark, es pecado pasar un día de turismo en Ámsterdam y no ver una cosa tan jkhdfdsjkf ❤

turismo en Ámsterdam parque Volderpark
Lo de las flores en Ámsterdam es otro tema <3

Bueno eso, que íbamos a empaparnos de cultura museíl hasta que se cruzó ese por medio. A lo que estamos. Tienes muchos, puedes verlos todos (pero vamos, que entonces se acaba aquí tu paso de turismo en Ámsterdam, no tengo más que añadir). Si quieres seguir recorriendo la ciudad, entonces selecciona aquellos que más te interesen: el museo Van Gogh, el Rijksmuseum, el Concertgebouw, el Stedelijk, la factoría de diamantes Coster Diamonds, el Musemplein… ¡Ah, y la casa de Anna Frank!  Si te da la hora de comer puedes elegir uno de los restaurantes y cafeterías del parquecito. O montarte tu propio picnic postureoso, momento casual para grabar en tu instagram.

Ah, si nos ponemos a hablar de comida no te vayas sin comer unos buenos arenques frescos, es uno de los tentempiés más típicos de Ámsterdam. Puedes encontrarlos en quioscos de la ciudad (como los típicos puestos de perritos calientes de por aquí). Siguiendo por ahí tampoco debes pasar de sus quesos: Edam, Gouda, Massdam… Si eres de los que siempre piden la pizza cuatro quesos, vas a disfrutar. Si quieres una comida más contudente, la cocina indonesia que puedes degustar en Ámsterdam no está nada mal.

Bueno, pilas recargadas. Calculo que se te habrán hecho eso de las 4 de la tarde, y aún queda tiempo para mucho. Tienes que ver sí o sí el mercado de las flores y el mercado Albert Cuyp. El primero, mundialmente conocido, es un placer para los sentidos, y el segundo es el más popular de toda Holanda. Sus más de 300 puestos cierran a las 5, así que corre (o en su defecto, coge la bici o el tranvía). Hay otros mercados con los que es probable que te topes al caminar por la ciudad, échales un ojo, son de los mejores del mundo.

mercado de las flores en un día en Ámsterdam
Ah sí, que es un mercado colgante, no te lo habíamos dicho 😉

Después de todo esto toca reponer fuerzas antes de acabar el día de turismo en Ámsterdam. Puedes hacerlo con una cerveza y un bitterballen en alguna de las terrazas de Nieuwmarkt. Son una especie de bolitas de carne (deliciosas, toma nota). El Nieuwmarkt está en pleno Barrio Chino de Ámsterdam, y muy cerquita del Barrio Rojo. Es el momento de conocer el lado más vanguardista, desenfadado y liberal de la ciudad. Un contraste de culturas y una forma de conocer en un rato la diversidad que se da cabida dentro de Ámsterdam.

La noche se estará acercando, y las opciones que ofrece Ámsterdam son muy variadas cuando cae el sol. Conciertos, jazz, discotecas, un paseo bajo la luna por la orilla de los canales… Las opciones son innumerables. Un secreto. Visita la web Last Minute Ticket ShopSi en el momento no tienes planes, hay descuentazos en eventos de hasta el 50%.

Y nada, no sé que hora te habrá dado, pero sea la que sea ya es hora de dormir. Prueba superada. La pereza no te ha ganado y ya tienes tu móvil lleno de fotos de Ámsterdam, y tu cabeza y tu heart lleno de experiencias asociadas a esta bonita ciudad. ¿Ves cómo un día en Ámsterdam sí daba para mucho?

PD: Para lo de los museos y las colas, que lo de esperar es un tostón. Como vas con el tiempo justo lo mejor es pillar la Iamsterdam Card. No esperarás colas, incluye un trayecto en el barquito, descuentos en restaurantes y toooodo el uso del transporte público de la ciudad gratis. Bueno, que la has pagado antes, pero vaya, nos entendemos 😉