Las 12 curiosidades gastronómicas que descubres al viajar por Europa

Está claro, la dieta mediterránea es la que más mola. Y punto. Donde esté la paella, el pescaito, los buenos cocidos y el largo etcééééétera gastronómico de nuestro país, que se quite todo lo demás. Pero nos mola viajar por Europa y descubrir y probar, y no podemos quedarnos sin comentar las 8463875634 curiosidades gastronómicas que a los españoles nos sorprenden de otros países al viajar.

Pero today no escribimos nosotros, hoy sois vosotros los autores de este post, queridos airhoppers que amáis viajar por Europa. Nos habéis contado por instagram las cosas que más os han sorprendido en vuestros viajes (vale, no estábais haciendo un airhopping pero os perdonamos porque todavía no habíamos nacido y claro…).

Allá va, la recopilación más top entre las top, hecha por vosotros. ¿Estará tu aportación añadida al post?

  1. En Europa aman el AGUA CON GAS. Da igual el país, absolutamente en todos, el agua con gas es la bebida por excelencia. Crisis existenciales para encontrar en el super agua sin gas, huidas al baño en mitad de la comida con tus familias de acogida para beber agua del grifo, beber cerveza como sustitutivo… Todo vale. Y es que al final, parece que los raros somos los españoles, porque pasan en todas partes.
  2. A falta de aceite, buena es la mantequilla. Yes, mantequilla all day, vamos a inflarnos. Y es que en España basamos nuestra dieta en el aceite de oliva, pero en el resto de países (Alemania e Irlanda súper repetidos) la mantequilla es la salvación. Si vas de visita, prueba a regalarles una botella de un buen aceite de oliva, lo verán como oro caído del cielo!
  3. En Alemania son adictos al pepino. Lo de las salchichas y la cerveza es cierto, sí, pero es que lo del pepino lo llevan a otro nivel. Todas las noches cae pepino de acompañamiento en la cena, TODAS. Y si pueden añadirlo en el desayuno y en la comida, no le ponen pegas. Mantequilla con pepino, why not? Eso sí, en la merienda siempre cae un trozo de tarta. Y luego vienen con el «uy, me he pasado, a la noche toca pepino» y solucionado. Es como el «esta noche toca piña» en España después de un buen atracón.
  4. En Irlanda llevan los horarios cambiados. Cenar a las 6 de la tarde, bien, no? Y es que si vas a Irlanda no va a quedarte otra que adaptarte al máximo. Desayunan a tope, pero a las 12 de la mañana ya están comiendo. Claro, así cualquiera a las 3 de la tarde necesita ya merendar. Y no es el único, Londres también lo peta con sus horarios para comer.
  5. En Italia hay algo popular además de la pasta. Y es que el café italiano y los helados son dignos de mencionar al viajar por Europa. Calidad, sabor rico rico y tradición. Dato importante, no te asustes si ves niños bebiendo café, allí es lo más normal del mundo.
  6. Los alemanes lo petan en temas de reciclaje. Si llevas latas o botellas usadas al super, en Alemania tienen unas máquinas en las que puedes conseguir vales descuento. Buena vaina para fomentar el reciclaje, no? 🙂
  7. ¿Un chupito de agua? En Polonia, yes. Cuando pides un café, en Polonia lo acompañan con un chupito de agua. Parece mentira, pero en Polonia evitan el Vodka y prefieren el vino. También aman los derivados lácteos (cocinan mucho mucho con nata), pero evitan la leche. Lo más normal y lógico del mundo, exacto.
  8. Abusar de las patatas es cosa de Irlanda. Fritas, cocidas, asadas, en puré… Variedad absoluta, pero todos los días comerás patatas. Con salsas, mil salsas distintas, porque también aman las salsas. Eso sí, nos cuentan que en el McDonalds no hay patatas deluxe, pecado. Y hablando de patatas, sé lo que estás pensando y no, no hacen nuestra tortilla. Así que ya sabes lo que te toca ;).
  9. En Hungría se come sopa de frutas. Sí, sopa, que no zumo. SOPA DE FRUTAS. Nada más que añadir.
  10. En Francia toman fideos como acompañamiento. Llamémoslo fideos, llamémoslo pasta con forma alargada y gorda puesta en el plato like a patata frita. Igual tendrían que hablar con los irlandeses por el tema de los consejitos sobre alimentarse a base de patatas.
  11. En Reino Unido tiran de comida precocinada siempre. Pero andan listos, y lo que hacen para evitar el precocinado nivel extra es optar por probar comidas de 84735896348 países diferentes. Así que allí, podrás encontrar absolutamente de todo.
  12. Holanda hace croquetas para sobrevivir. Y a base de croqueticas han levantado el país. Lo curioso es que las hacen a cantidades industriales, y tienen casilleros «térmicos» para conservarlas. ¿Y de acompañamiento? Un poquito de puré de patata al estilo holandés «muy suyo», hay que probarlo para poder opinar.

Y en Cracovia aman el picante y le echan pimienta a todo, en Suecia comen reno como si fuera pollo, en la República Checa no perdonan la sopa como primer plato siempre, en Croacia recurren a todas horas a una empanada de queso grasienta como tentempié… Son mil cosas las que descubres al viajar por Europa,

Lo único que está claro, es que vemos raro todo lo que no hacemos siempre, y que seguro segurísimo que los extranjeros, cuando llegan a España, lo flipan con nuestra forma de comer, nuestros horarios y nuestras tradiciones.

Bueno, y también está claro clarísimo que un McDonalds nos salvará allá donde vayamos.

P.D. Y que después de leer todo esto, hay ganas mil de viajar y descubrirlo todo con tus propios ojos. Lo mejor, planear tu airhopping ya de ya. ¿A cuántos destinos nos vamos?

 

¡Prepara tu próximo airhopping ya!